Comentario sobre las medidas iniciales implantadas en la industria del fútbol a causa del COVID-19
El COVID-19 ha irrumpido fulminantemente en la sociedad, sacudiendo con una fuerza implacable los cimientos de todos los sectores de la economía. Como no podía ser de otra manera, la industria del deporte no es ajena a esta delicada situación y lógicamente se ha visto obligada a frenar en seco su actividad.
En España, siguiendo el estado de alarma decretado por el Gobierno el pasado 14 de marzo de 2020 para la gestión de la crisis sanitaria y la consecuente imposibilidad de los deportistas de ejercer su profesión, el deporte ha quedado paralizado sin visos de una próxima reanudación mientras que persista el riesgo de expansión del denominado coronavirus, afectando irreversiblemente no solo al sector específico sino al mundo del ocio y del entretenimiento a nivel global.
Ante este inquietante panorama, a continuación se exponen algunas de las diferentes y significativas medidas iniciales que se han ido implantando tanto a nivel nacional como internacional durante las primeras semanas[1] del confinamiento forzoso:
- De modo preliminar, como es sabido, la grave crisis sanitaria acuciada por el gran potencial de transmisión del coronavirus ha provocado de entrada que prácticamente la totalidad de las competiciones futbolísticas internacionales y domésticas se hayan visto afectadas, suspendiendo el transcurso de las mismas con carácter inmediato y sine die.
- En algunos supuestos, la suspensión provisional se ha tornado en definitiva como ha ocurrido en el fútbol aficionado de Inglaterra. A este respecto, la Football Association emitió un comunicado el pasado 26 de marzo de 2020 por medio del cual informaba de la cancelación de los niveles tres (3) al séptimo (7) de las categorías semiprofesional y no profesional y de la pirámide del fútbol femenino.
- En línea con lo anterior, esa misma decisión se ha tomado en la Junta Directiva de la Jupiler Pro League, esto es la Primera División de Bélgica (denominada de esta forma por razones de patrocinio). No obstante, cabe matizar que esta resolución deberá ser ratificada por los veinticuatro (24) clubes que integran la Primera y Segunda División belga de fútbol en la reunión que tendrá lugar el 15 de abril de 2020.
- Continuando en el plano europeo, la UEFA ha implementado[2] las siguientes medidas previas:
- Suspensión de las competiciones Champions League y Europa League.
- El torneo UEFA EURO 2020 se aplaza al verano de 2021.
- Todos los partidos de selecciones nacionales que se iban a jugar en junio de 2020 (correspondientes a partidos de play-offs para la UEFA EURO 2020 y los partidos de clasificación para el Campeonato de Europa Femenino de la UEFA 2021) se aplazan hasta nueva orden.
- Cancelación de competiciones juveniles de selecciones (campeonato de Europa Sub-17 de la UEFA programada para mayo de 2020, campeonato de Europa Femenino Sub-19 de la UEFA prevista para julio de 2020, campeonato de Europa Femenino Sub-17 de la UEFA programada para mayo de 2020, campeonato de Europa Sub-19 de la UEFA programada para julio de 2020.
- Las fechas relacionadas con todas las competiciones de clubes de la UEFA de la temporada 2020/2021 se aplazan hasta nuevo aviso, en particular en lo que respecta al proceso de admisión e inscripción de jugadores.
- Suspensión de la normativa sobre licencias de clubes concernientes a la preparación y evaluación del estado financiero de los clubes para la participación en las competiciones de clubes de la UEFA 2020/2021.
- Por su parte, la Confederación Sudamericana -la CONMEBOL- ha aprobado unas disposiciones similares a las de la UEFA:
- Suspensión inicial hasta el 5 de mayo de 2020 de las competiciones Libertadores y Sudamericana[3].
- Aplazamiento de la edición 47 de la Copa América al 11 de junio hasta el 11 julio de 2021.
- Reprogramación de torneos de selecciones (CONMEBOL Sub-20 Femenino, CONMEBOL Sub-17 Femenino, CONMEBOL Copa América de Fútbol Playa).
- Con el objeto de que los clubes puedan afrontar sus necesidades financieras con mayores garantías, realiza un adelanto de recursos económicos a los clubes participantes y aún activos en las vigentes Libertadores y la Sudamericana.
- Preparación de un protocolo médico para la prevención del COVID-19.
- La FIFA, en su condición de organismo rector del fútbol a nivel mundial, ha llevado a cabo determinadas acciones preliminares[4] con el fin último de buscar soluciones equilibradas que procuran proteger los intereses de todas las partes involucradas:
- Aprobación de los aplazamientos de la Copa América 2020 y la EURO 2020 a junio/julio de 2021.
- Fijar una nueva fecha para la disputa de la competición de clubes de nueva creación (Copa Mundial de Clubes de la FIFA).
- Preparación de modificaciones o exenciones temporales del Reglamento sobre el Estatuto y la Transferencia de Jugadores con el propósito de adaptarlo a la concurrente situación, en particular, en lo que se refiere a aquellos contratos que finalizan el 30 de junio de 2020 y las siguientes ventanas de transferencias.
- Estudio de los obligados cambios en el calendario con las confederaciones, federaciones miembro y otras partes interesadas.
- Establecimiento de conversaciones para crear un fondo mundial de asistencia financiera en beneficio de determinados integrantes de la comunidad futbolística gravemente afectados.
- Aportación directa de diez millones de dólares (10.000.000 USD) al fondo solidario establecido al efecto por la Organización Mundial de la Salud.
- El aplazamiento de competiciones ha sido inevitable hasta el punto de que el Comité Olímpico Internacional se ha visto obligado a postponer al 2021 la competición deportiva por antonomasia, los Juegos Olímpicos de Tokio[5], creando a su vez un efecto dominó (a título ilustrativo, determinados torneos mundiales previstos para el 2021 se van a postergar al 2022 para evitar su solapamiento con los Juegos Olímpicos como son los mundiales de atletismo y natación, europeo de baloncesto, etc.).
- Centrándonos en el plano nacional, en España se ha producido diferentes hitos durante el periodo inicial tras el apogeo de esta terrible pandemia:
- El 9 de marzo de 2020, la Liga Nacional de Fútbol Profesional (en adelante, “LaLiga”) informó formalmente a los clubes y sociedades anónimas deportivas pertenecientes a las divisiones profesionales de la decisión del Consejo Superior de Deportes de disputar al menos las dos (2) sucesivas jornadas a puerta cerrada.
- Habida cuenta de la creciente gravedad de la situación provocó que el 11 de marzo de 2020 la Real Federación Española de Fútbol (en adelante, la “RFEF”) emitiera la Circular núm. 62[6] en cuya virtud se anunciaba la suspensión de todas las competiciones estatales no profesionales masculinas y femeninas de fútbol y fútbol sala durante las siguientes dos (2) semanas.
- Sucesivamente, LaLiga remitió una circular informativa del aplazamiento de la competición, prestando a su vez una serie de recomendaciones. La RFEF igualmente ha promulgado una circular informativa de medidas relacionadas con la salud, la competición y la economía[7].
- Así las cosas, una vez aplazada la competición, en el seno de la Comisión de Seguimiento del Convenio de Coordinación suscrito entre la RFEF y LaLiga, se acordó suspender las competiciones profesionales de fútbol hasta que las autoridades competentes del Gobierno de España y de la Administración General del Estado consideren que se puede reanudar las competiciones sin que ello suponga ningún riesgo para la salud.Por consiguiente, a la fecha de elaboración del presente comentario las competiciones profesionales de fútbol se encuentran suspendidas sin fijar una fecha concreta de regreso, anudando un sector que genera el 1,37% del producto interior bruto nacional y con un volumen estimado de ingresos por valor de quince mil seiscientos ochenta y ocho millones de euros (15.688.000.000 €).
- Las vastas consecuencias económicas han provocado que los clubes y deportistas se vean obligados a tomar unas medidas sin precedentes tendentes a minimizar lo máximo posible el monumental impacto sufrido.Así, mientras que determinadas entidades han acordado con sus plantillas un reajuste salarial, un número elevado de clubes y sociedades anónimas deportivas (entre los cuales destaca el Fútbol Club Barcelona, el Club Atlético de Madrid, S.A.D. o el Real Club Deportivo Espanyol, S.A.D.) han solicitado a la autoridad laboral competente el inicio de un expediente de regulación laboral de empleo por causas de fuerza mayor.Dicho proceso viene regulado en el Real Decreto-ley 8/2020 de 17 de marzo de 2020 de medidas urgentes extraordinarias para hacer frente al impacto económico y social del COVID-19 el cual deja sin efecto temporalmente el procedimiento establecido en el artículo 47 del Estatuto de los Trabajadores.
En definitiva, de las medidas iniciales implementadas en la industria del fútbol se desprende con nitidez el inflexible impacto global del COVID-19 que creará un antes y un después en el deporte. El tiempo dirá si la adversidad ha supuesto un punto de inflexión.
[1] A efectos aclaratorios, hasta fecha 31 de marzo de 2020.
[2] Para más información, véase: La UEFA pospone todos los partidos de selecciones nacionales de junio
[3] Suspensión Temporal – CONMEBOL Libertadores y CONMEBOL Sudamericana 2020
[4] Comunicado del Presidente de la FIFA
[5] Olympic Games postponed to 2021
[6]Disponible en: Circular 62 RFEF
[7]Disponible en: Circular informativa RFEF